Hoy traemos una receta, solo para los amantes de la casquería, a nosotros nos encanta!!
Nos gustan todos los guisos con casquería, manitas de cerdo, callos de ternera, riñones de cordero, hígado de cerdo o ternera, oreja, rabitos, patitas de cordero, ya, ya sé que no a todo el mundo le gusta, bien lo hayan probado o no les apetece hacerlo.
A los que por el contrario si os gusta, deciros que tenemos en el blog un montón de recetas muy ricas con productos de casquería.
Hoy vamos a hacer hígado encebollado, también de puede hacer empanado o rebozado.
Bueno, a los que os apetezca, os invito a mi cocina.
En la tierra donde yo nací, en Salamanca, la jeta es muy típico tomarla de apertivo en los bares. Ahora que hace años que no estoy allí la echo mucho de menos.
Hoy me apetecía mucho comerla de aperitivo, así que manos a la obra, digo a la cocina 😉
Nos vamos al súper a comprar la careta de cerdo.
La lavamos bien y la limpiamos con papel absorbente de cocina.
Limpia las manitas con agua y un chorro de vinagre para que queden bien blancas.
Ponemos la olla al fuego, añadimos agua, cebolla, ajo, laurel y dejamos que cuezan 50 minutos.
Abre la olla y saca las manitas.
Colócalas con la piel hacía arriba en una fuente para horno y salpimenta (sal y pimienta).
Espolvoréalas con pimentón.
Lava y pela las patatas y corta en rodajas finas, ponlas en la fuente del horno, añade sal.
Añade tambien la cebolla en juliana, el ajo y el perejil.
Pon también un chorretón de aceite y un poco del caldo de la cocción de las manitas.
Precalienta el horno a 180º durante 10 minutos.
Introduce la bandeja en el horno, deja que se hagan las patatas y se doren bien las manitas, apróximadamente 10 o 15 minutos, solo tienen que dorarse, por dentro están cocidas y tiernas.
Cuando estén las manitas las sacamos a una fuente, si las patatas no están hechas las dejamos un poco más en el horno.
Las servimos calientes.
Sugerencia:
Las podéis hacer directamente en el horno sin pasar por la cocción, aunque de esta manera las tendréis que dejar doble de tiempo en el horno hasta que estén bien hechas. También podéis hacerlas guisadas con salsa.