Hoy vamos a hacer unas albóndigas diferentes, más sanas y saludables.
Las vamos a cocinar en el horno.
Las haremos con muy poquita grasa, apenas llevan aceite.
Después las acompañaremos con salsa de tomate y allioli.
Quedan muy jugosas y riquísimas. Además no vamos a manchar nada la cocina y eso es un alivio.
¿Me acompañas?
Preparación:
Precalentamos el horno a 180ºC durante 10 minutos.
En un bol grande ponemos la carne picada, agregamos el huevo, la sal
agregamos el pan rallado
agregamos el vino blanco y removemos
añadimos ajo, perejil, orégano y el queso rallado.
Mezclamos bien todo
todos los ingredientes para que nos quede todo bien unidos
hacer bolas procurando que nos queden todas del mismo tamaño. Nos han salido 14 albóndigas con estos ingredientes.
Las colocamos en la bandeja del horno encima de un papel de hornear para que no se peguen. Las rociamos por encima con un chorrito de aceite.
Introducir la bandeja en el horno durante 30 o 35 minutos o hasta que esté doradas.
Cuando estén las sacamos a una fuente, las unimos con los pinchos para brochetas y servimos con el tomate y el allioli.
¡Nos han quedado buenísimas!
Pelamos y lavamos las patatas, las cortamos muy finas y las freímos en aceite de oliva. Las servimos con las brochetas.
Sugerencia:
Podéis hacerlas con la carne mitad ternera y mitad de cerdo.
A mí personalmente no me gusta mezclar, pero sí hay a quien le gusta.
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