Lo más importante de este postre es servirlo muy frío.
Cuando digo “muy frío” no quiero decir congelado, pero…. casi.
Es ideal para días de verano en los que no sabes cómo refrescarte.
Una buena ración de este postre y paliaremos los calores.
También lo podemos hacer con otras frutas, con la que más os apetezca.
Ingredientes:(4 personas).
- 4 yogures de limón azucarados.
- 1 bote de leche condensada de 350gr.
- Canela en polvo o fideos de chocolate.
- Barquillos de chocolate.
- El zumo de 2 limones.
Tiempo: 30 minutos.
Dificultad: baja.
Preparación:
Vacía en un recipiente cuatro yogures de limón, el bote de leche condensada y el zumo (colado) de los dos limones.
Enchufa la batidora y bate todo durante algo más de un minuto. 
Cuando el contenido del recipiente quede homogéneo, tápalo con papel film y mételo en la nevera.
Esto último es muy importante para que no coja el sabor de otros productos que tengamos en la nevera y que sean de olor fuerte.
Imagina el olor de un queso azul invadiendo este plato… Mejor no lo imagines.
Cuando esté frío – muy frío, recuerda -, sírvelo en copas y espolvorea por encima con canela en polvo o fideos de chocolate.
O pon ambas cosas en recipientes pequeños y que sean los invitados los que se sirvan de lo que más les guste.
También queda muy bien una hoja de menta para decorar.
Lo dejo a vuestro gusto.
Eso si, decoraremos con barquillos bañados en chocolate.
Sugerencia:
Cualquier momento del día es bueno para tomar una copa de mousse. Como postre después de la comida o para la merienda.
¡Está deliciosa!
Y ya veis lo fácil que se prepara.
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