Hoy me apetecía hacer croquetas para el aperitivo y las quise hacer diferentes, pues manos a la masa, nunca mejor dicho. Me han quedado con un sabor estupendo, tenéis que comprobarlo. Ya tenemos la receta de atún y huevo, estas llevan el mismo procedimiento pero utilizaremos unos mejillones en conserva.
Ingredientes: (4 personas).
- – 1 lata grande de mejillones en escabeche.
- – 1L de leche.
- – 8 cucharadas de harina.
- – Aceite de oliva.
- – Sal.
- – Pan rallado.
- – 3 huevos para batir.
Tiempo:60 minutos.
Dificultad: media.
Preparación:
Ya sabeis que la clave de las croquetas está en la masa. Tienes que tener mucha paciencia, remover despacio para que quede en su punto. Pica en un plato los mejillones en trocitos.
En una sartén grande ponemos un poco de aceite de oliva y rehogamos los mejillones. Cuando esté listo, añadimos poco a poco la harina, mezclamos, y vamos incorporando la leche en pequeñas cantidades, removiendo con cuidado.
La masa estará lista cuando por si misma se despegue de la sartén, ese es el truco de la cocinera. Aparta la masa y extiéndela en una fuente. Luego déjala enfriar durante unas cuatro horas a temperatura ambiente.
Una vez la masa se haya enfriado, procederemos a hacer las croquetas. en una fuente bate los huevos y en otra pon el pan rallado para envolver las croquetas. Ve cogiendo pequeñas porciones de masa y vas dando forma. Pásalas por huevo batido y acto seguido al pan rallado. Cuando estén todas preparadas, fríelas en aceite bien caliente, de esta forma quedarán crujientes por fuera. Si rallamos el pan en casa, nos quedará más grueso y quedarán mucho más crujientes. ¡Buenísimas!
Sugerencia: Podéis poner el relleno que más os apetezca.