Delicioso postre italiano adaptado a mi manera, cocina española casera.
Es una tarta que gusta a todo el mundo por su cremosidad y su delicioso sabor.
Si la puebas una vez seguro que repetirás siempre.
Es muy fácil de elaborar.
Os va a encantar.
¿Me acompañáis a la cocina?
Ingredientes: (4 personas).
- 1 paquete de bizcochos.
- 2 tarrinas de 250gr. de queso mascarpone o similar.
- Huevos (5 yemas y 2 claras).
- Licor de Amareto o de café.
- 1 vaso de café exprés fuerte.
- Cacao en polvo puro.
- 3 cucharadas de azúcar glas.
- 2 cucharadas de azúcar para endulzar el café.
- Chocolate negro.
- 1 pizca de sal.
- Barquillos de chocolate (opcional).
Tiempo: 60 minutos.
Dificultad: baja.
Preparación:
Prepara un vaso de café exprés y añade dos cucharadas de azúcar.
Deja que se enfríe y añade un vaso de chupito de licor de Amareto.
Batimos las 5 yemas de huevo con el azúcar glas, usa varillas eléctricas hasta obtener una crema consistente, reservamos en la nevera.
Bate en otro recipiente las claras con un pizco de sal hasta que estén montadas a punto de nieve bien consistentes, tanto que si le das la vuelta al bol no se caigan.
Mezcla el queso con la mezcla de las yemas, hazlo con una espátula o lengua pastelera, envuelve con mucho cuidado hasta obtener una mezcla suave.
Ahora mezcla con sumo cuidado las claras a punto de nieve con toda la crema.
Pon en otro recipiente el café con el licor y ve empapando los bizcochos en el, nosotros hemos utilizado los bizcochos duros, así no se desacen al mojarlos.
Prepara el molde que vayas a utilizar para la tarta, nosotros la hemos forrado con papel film para poderla desmoldar mejor y si os apetece la podéis servir desde el propio molde.
Vierte en el fondo del molde una capa de crema y encima una capa de bizcochos, bien apretados y colocados de uno en uno.
Ahora otra capa de crema, otra de bizcochos, y así hasta darle la altura que os apetezca, siempre terminando con la crema.
Introducimos el molde en la nevera unas 8 horas para que esté bien cuajada. mejor si la hacéis de un día para otro, quedará mucho más consistente.
Cuando vayáis a servirla la espolvoreáis con cacao en polvo y adornáis con virutas de chocolate negro y barquillos.
Se sirve muy fría.
¡¡Queda riquísima!!
Sugerencia:
Si la van a tomar los niños suprimimos el licor por alguno que no contenga alcohol y el café por descafeinado.
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